Hola a todos los blogueros.
En primer lugar, felicitar a todas las Cármenes. Ya que hoy es su santo y también el día grande de las fiestas de Santurtzi, mi pueblo. Sardinas no quedan, nos las comimos todas el viernes….
Centrándonos en el tema, el veranito y el calor ya están aquí. Hago referencia a esto, para hablar de cómo afecta el tiempo a los enfermos de ela. Está claro que afecta a todo el mundo, pero cuando no tienes masa muscular, afecta de otra forma. En veranito, con los días de mucho calor, a todos nos achicharra el calor. Y provoca que nuestros cuerpos, pesen el doble. Pues imaginaros en mi caso, 62 Kg multiplicado por el calor que hace……. Nos da un cuerpo de más de 100 Kg. Ahora, si este cuerpo no tiene fuerza en los músculos para moverse. Nos da un resultado de lo más agotador. Con el frio, también lo pasó mal. Al no tener grasas ni músculos, me paso todo el invierno embutido en ropa térmica y tiritando. Me voy a ir a un sitio donde haga 0 grados. NI FRIO, NI CALOR.
Cambiando de tema. Este parrafillo se lo dedico a delfín. Que siempre quiere y no puede.
A principios de verano, me propuse un objetivo. Ir a la piscina y bañarme con mi hija. He nadado toda mi vida en el club natación Santurtzi. En kilómetros nadados, abre dado alguna que otra vuelta al mundo. Pero llevaba 2 años sin tocar el agua y mi cuerpo no era el mismo. Tenía mucho miedo y también envidia de lo que hacía antes y ahora no podía hacer. Pues ayer, llego el gran día. Me arme de valor y después de unas cuantos alientos de ánimo por parte de mis allegados, me bañe. Me dejo una silla de ruedas manual el polideportivo. Mejor, porque mojar mi silla y luego tener que andar con ella todo el rato húmedo, como que no. Me monte en la silla y allí fuimos. Las socorristas de la piscina, de MATRICULA DE HONOR. Se portaron súper bien y muy atentas. Según aparecí en la piscina con la silla, allá que se giro todo el mundo a mirarme. Diossss, como lo hace Bisbal para no ponerse nervioso ante tanta gente mirando….. Bueno, ya cuando me puse en el elevador que te baja al agua, aquello fue la leche. Miro hacia abajo y miles de niños concentrados debajo mío, asomando la cabeza. Parecía esos espectáculos de delfines, que les ponen la sardina y ellos saltan a cogerla. Pues lo mismo, esperaba que algún niño saltara buscando su sardina. La socorrista empezó a bajarme y me dijo “EL AGUA ESTA FRIA”. Pero ya no había vuelta atrás. El agua me llego a los pies y más o menos era agradable. Rodillas y sin peligro. Pero cuando llego el agua a mis partes nobles…. ahora sí que estaba fría. Sera que los hombres tenemos ahí el sensor de temperatura como los coches???. Ya estaba en el agua, contento y congelado. Me agarre al bordillo y tuve mi primer problema. Mi cuerpo flota y yo no tengo fuerzas para contrarrestar la presión del agua. Pegue mi primer trago de agua. Dos más y la vacio, pensé. La socorrista estuvo atenta y me ofreció todo tipo de ayudas. Como los niños, allí me puse los manguitos. Imaginaros la estampa, adulto de 32 años con manguitos. Así que claro, empezó el interrogatorio de los niños de mí alrededor. Pero bueno, con los manguitos me estabilice mas y no tuve problemas. Conseguí nadar solo y jugar en el agua con mi hija. Transcurridos 15 minutos y millones de tembleques por el frio, salí del agua más contento que unas castañuelas. Eso sí, no fui hombre hasta pasados unos minutos. No tengo fotos, pero prometo hacerlas.
Esta experiencia, se la recomiendo a todo el que pueda. La sensación de libertad en el agua, es increíble. Creo que la fisioterapia en el agua, es una gran idea. Tanto como para el cuerpo, como para la mente y el ánimo.
Quiero dar las gracias a Manti y a las socorristas de la piscina, por haber hecho posible mi sueño.
El siguiente reto, ya veremos. Lo de montar en un fórmula 1, lo tengo pendiente….
Un saludo a todos y gracias por leerme.
Os animo a venir a las fiestas del Carmen en Santurtzi!!!!