A continuación os dejamos un interesante artículo de la Dra. Mar Mendibe, neuróloga de la Unidad de Esclerosis Múltiple del Hospital de Cruces, sobre las peculiaridades del género en Esclerosis Múltiple, enfermedad que afecta a más mujeres que hombres, una tendencia que sigue en ascenso.
ESCLEROSIS MULTIPLE Y GENERO
Las cuestiones relacionadas con el género en las enfermedades neurológicas, en concreto enla Esclerosis Múltiple(EM), están en el primer plano dela actualidad. Cadavez cobran más importancia las interacciones que existen entre el sistema nervioso central, inmunológico y endocrino.
En 2008 se publicó una revisión sistemática basada en 38 estudios epidemiológicos publicados entre 1966 y 2007, que reveló un aumento de la incidencia de la EM en mujeres. Hace unas décadas la relación hombre/mujer era 1:2, es decir, un varón afectado por cada dos mujeres. En los últimos años este ratio se ha incrementado a favor de las mujeres: 1:3,5. Este aumento tan rápido de la EM en el género femenino no se puede explicar por razones genéticas que necesitan periodos de tiempo más largos para producirse. Se supone que estos cambios reflejan variaciones en el entorno interno y externo que podrían explicarse por diferentes factores ambientales y hormonales complejos.
Durante el embarazo y postparto se producen unos cambios inmunológicos y hormonales que nos podrían ayudar a conocer mejor la fisiopatología dela EM. Tenemosamplia información sobre el comportamiento de la EM en estas situaciones a corto plazo. El estudio PRIMS sobre el riesgo de brotes o recaídas durante la gestación y otros muchos estudios similares realizados en diferentes países demostraron que la recaídas son mucho menos frecuentes durante el embarazo, sobre todo en el segundo y tercer trimestre. En los tres primeros meses después del parto o puerperio estas recaídas se incrementan, así como la actividad de la enfermedad medida por resonancia magnética. Aproximadamente, un 30% de las mujeres sufren recaídas tras el parto. Pasado este periodo de tiempo, la enfermedad vuelve a comportarse como los años anteriores al embarazo. No obstante, algunas mujeres debido a distintos factores como la gravedad de la enfermedad, el hecho de tener que abandonar el tratamiento o por cuestiones personales prefieren evitarla maternidad. Encaso de que se decida planificar un embarazo, se recomienda consultar con su neurólogo correspondiente, suspender el tratamiento inmunomodulador o inmunosupresor y reanudarlo tras el parto.
Existen muy pocos estudios sobre la influencia de la menopausia y andropausia enla EM. Muchasveces, estas etapas coinciden en el tiempo con el cambio o evolución progresiva, pero se cree que son hechos independientes. Tres trabajos que estudiaron a 172 mujeres en esta etapa concluyen que no existe relación entre la menopausia y el pronóstico de la enfermedad ni el número de recaídas. Respecto a la anticoncepción hormonal y los tratamientos sustitutivos, se recomienda consultar con el ginecólogo y seguir las mismas indicaciones que la población general.
En un futuro las investigaciones sobre las conexiones entre el sistema nervioso central, endocrino e inmunológico junto con los estudios epidemiológicos nos ayudarán a esclarecer muchas cuestiones relacionadas con esta patología con el fin de que en los próximos años se diseñen tratamientos a medida de cada paciente.