El principito, Antoine de Saint-Exupéry.
Fracasado y roto en mil pedazos
Me vi con la dificultad de cómo conjugar
Ese verbo con mis trozos contaminados.
Me envolví de mil excusas
Para pegarlos con un pegamento especial:
Algo más elástico, algo más práctico.
Como si en vez de carne fuera de plástico.
De esta manera puedo tocar más instrumentos
Para conseguir llamar tu atención.
Tengo asumido que no la veré de nuevo,
Al menos en esta dimensión.
Sigo en este estado sin condición
Y solo te pido una concesión:
La perdí por consecuencia de mis celos;
Por verme como un cachorro de león
Que intenta atrapar cien mariposas.
Creí encontrar a una ratita presumida
Y conviví con una bruja en el sofá.
Tantos lunares que contar para pasar el rato
Pero en la ratonera la ilusión escaseaba.
Dime sol si aun hay flores para mí
O solo la luna se acuerda de mí.
Tantas noches a dos velas
Que pagué con excelsa limosna mi soledad.
Ella me acunó en ese terrible insomnio
Y la verdad del verso me dio.
Luna es guía de este huérfano negro
Y ella escucha mi lamento,
Deja que llore en sus pechos
Y que se los riegue con amor
Que otros los sirven en bandeja.
Me disparaste al corazón con balas de plata
Y aullé de dolor en su ratonera.
La ratita una espina clavó
Y en vez de una me volví con dos
¡Qué amor más dañino!
¿Por qué diablos la tomas conmigo?
El león quiso decir pero ella ya no estaba
Por eso ahora anda en estado de alerta
Esquivando tu amor en conserva
Buscando algo más sincero
Algo más sincero que furtivo
Cansado ya de cazadores
De que mandes tus átomos exploradores
Para ver cómo reacciono
Y así ver donde morder…
Por eso ahora amo la sencillez y la sinceridad
Más que la astucia y la sutileza
Algo más que de todas ellas prefiero rodearme.
Licenciado Letrinas
