La marea naranja es una campaña de protesta por los recortes que están llevando a cabo las administraciones en los servicios sociales. Es naranja porque de ese color son las camisetas con las que nos identificamos. Es marea porque cada vez somos más quienes denunciamos que las políticas de recortes están generando exclusión y acabando con la cohesión social.
Desde el CGCEES consideramos que los avances sociales que se han producido en los últimos años están en grave riesgo, es por esto por lo que solicitamos a los poderes públicos (locales, autonómicos y estatales) y a toda la sociedad, que apuesten decididamente por unas políticas sociales de calidad. Se hace cada vez más necesario el cumplimiento de los derechos sociales de la ciudadanía.
La situación actual genera que cada vez existan más personas y colectivos en riesgo de exclusión y esto no solo no permite recorte alguno de servicios, sino que, muy al contrario, exigen una mayor dotación de recursos que prevengan contra los evidentes riesgos de una mayor desigualdad social.
El reto de mantener unos servicios sociales de calidad es un reto de todas las personas, la sociedad civil (organizaciones de iniciativa social, personas y colectivos beneficiarios de los servicios, profesionales y la sociedad en su conjunto) y las administraciones públicas. La implicación de todos los agentes se tiene que hacer efectiva en la planificación, gestión y evaluación de los servicios. Con una ciudadanía responsable tendremos sin duda una sociedad más cohesionada y equitativa, en definitiva, una sociedad más justa.
Las entidades que formamos el Consejo General de Colegios de Educadoras y Educadores Sociales (CGCEES) cooperaremos activamente, con otros profesionales de los servicios sociales, en garantizar el derecho de las personas como eje central y prioritario de las políticas públicas y estaremos vigilantes a que la sociedad de bienestar que hemos comenzado a construir no dé marcha atrás.
