Ez dugu gehiago negarrik egiten – No volveremos a llorar

“Mi conciencia tiene para mí, más peso que la opinión de todo el mundo”. Cicerón

Con la imagen con la que hemos iniciado hoy nuestro blog, queremos hacer la reflexión de que cada persona tiene una forma distinta de mirar.


Cuando oímos la palabra droga, siempre la relacionamos con cocaína, heroína, pastillas… pero y ¿el alcohol? ¿Qué es el alcohol?

En muchos carteles, textos, etc. podemos leer: “las drogas y el alcohol”. Pero, ¿por qué van separados? En la sociedad en la que vivimos, el alcohol está permitido, más que permitido es parte de lo cotidiano.

Todo el mundo la consume en alguna época y el que no lo hace nos extraña… que raro, ¿en serio no te gusta la cerveza? A todos nos gusta salir con los amigos, de fiesta, echar unas risas en las comidas familiares, cantar… Hay mucha gente joven, que si por algún catarro, por exámenes… no puede beber, los fines de semanas se quedan en casa argumentando que si no pueden beber, se aburren.

Los txikiteros nos hacen mucha gracia, tienen un entretenimiento con la cuadrilla todas las tardes. Un médico me dijo un día que mucha gente txikitera, al hacerle una historia por problemas de cirrosis, a la pregunta de: ¿cuánto bebe usted al día? Te contestaban que, pues lo que es beber no mucho. Eso si, hacemos la ruta de los bares con la cuadrilla y que, pos unos 3 vinillos en cada bar y recorren alrededor de 7 bares al día…

Durante este fin de semana, en una reunión con gente que ha tenido problemas de alcohol, salieron frases que me hicieron pensar mucho. El alcohol, esta en todas partes, en los supermercados, en todas las fiestas, en cada bar, en cualquier comida (familiar, amigos, trabajo…) cuesta intentar huir de ello. Para ellos es un trabajo desde que se levantan hasta que se acuestan. ¿Dónde se ha visto una cena de trabajo sin alcohol? Es lo primero que sacan a la mesa, ¡faltaría mas!

-El enemigo está detrás de ti y tiene mucha paciencia, siempre está esperando, a verte débil y atacarte.

-Es muy difícil darte cuenta que lo que haces no es normal, los bares están por todas partes. Cuando tienes un descanso o estas hablando tranquilamente, puedes llegar a beber 8 cañas mientras la gente se bebe un café o té; vas a una comida y te tomas 5 copas mientras los demás van por la segunda.… Pero lo ves como algo normal.

Una canción de LOR dice: Alkoholak eraman zituen lotsaren azken tantak (el alcohol se llevó las últimas gotas de vergüenza). Denbora bat igaro ondoren, halaxe da: ez dugu ezer sentitzen. Beste norbait da min duena; beste norbait errea, ebakia edo sufrimendua jasaten ari dena. Ez dugu gehiago negarrik egiten. (Cuando pasa el tiempo, no sentimos nada, no sentimos que el otro es el que está quemándose, sufriendo. No volvemos a llorar) ¿Enserio? ¿Y si fuera verdad? ¡Cómo molaría el alcohol, no!!

Mucha gente es lo que quiere conseguir, dejar de ser él mismo para poder aparentar algo que no es, pensando que con ello los problemas se olvidan o que se puede ser la persona que el resto quieres que seas. ¿Y luego, qué? Cuando has bailado encima de una barra o has montado un show en un Púb, y todo el mundo te mira porque te reconoce, ¿te sientes mejor?

Los vascos tenemos fama de beber mucho, eso me he dado cuenta en Valencia, en la copa del rey. Los valencianos se quedaban asustados, no daban abasto sacando zuritos, que digo zuritos, ¡KATXIS DE CERVEZA!, kalimotxo (en la carpa en vez de garrafa hacían kalimotxo al momento, era el comentario más oído entre los del Athletic: que raro estos valencianos, ¿no saben que veníamos los vascos? Mira que hacerlos a mano y no poner garrafa, menos pintxitos y ¡más alcohol!….).

Es parte de nuestro pasado, forma parte de la realidad actual y pretende ser nuestro futuro…

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