El pasado Mundial lo comenzamos con la ilusión de ver muchos goles y de disfrutar del buen fútbol de nuestros equipos favoritos, por otro lado, con la esperanza de que el gol más hermoso del Mundial lo consiguiéramos el día de la final, con un compromiso internacional a favor de la educación universal para todas las personas, un gol definitivo por la educación antes de que comience el próximo mundial 2014 en Brasil.Más de 14 millones de personas se solidarizaron con la educación universal mostrando una tarjeta amarilla a las y los líderes mundiales, pidiendo que se ponga fin a la injusticia que hace que uno de cada 10 niños y niñas del mundo no pueda ir a la escuela. A pesar de ello, el clamor popular no fue tenido en cuenta.